MONUMENTOS ARQUITECTÓNICOS

Dentro de los anales de la fundación del pueblo, después de la Conquista de México, los hispanos llegaron a estos lugares, capitaneados por Pedro Rodríguez de Escobar que había servido a las órdenes de Pedro Alvarado "El Adelantado"; sin embargo los verdaderos fundadores fueron los padres de la orden de los agustinos que acompañaban a los soldados, estos padres fueron muy activos en edificar templos y conventos, de esta manera Fray Andrés de la Manta y Fray Andrés de Barrios por órdenes de Fray Alonso de la Veracruz, edificaron el convento y la iglesia parroquial en 1550, bajo la advocación de San Miguel Arcángel. Es de suponerse que los nativos obligados por los frailes, habían de colaborar eficazmente como peones cargando piedras y canteras para ejecutar esculturas en machotes y capiteles e hicieran las monumentales pinturas monumentales en el interior del templo. Esta bella construcción arquitectónica, fue declarada Monumento Nacional en 1933.

Ya edificado el Templo de San Miguel Arcángel y construidos los caseríos del pueblo a orillas del Río Tula, se hizo necesario construir un puente de dicho río, esta obra, emprendida por el Capitán Don Miguel Cuevas y Dávalos, siendo inaugurado el 29 de Septiembre de 1655 día de San Miguel Arcángel patrono de la iglesia y del pueblo. El puente considerado como colonial, comunica al otro lado del río con el Barrio de la Otra Banda, hoy Barrio de Progreso. Está hecho de piedra con varios arcos sobre las columnas y enmarcado entre ahuehuetes, ofrece a la vista un bello monumento arquitectónico; en la parte de ambos lados del puente, había unas lápidas de cantera con la historia de la construcción y sobre una de ellas hallabas la estructura del Arcángel San Miguel abatiendo al diablo con su espada, todo esto, la estatua y las lapidas, desaparecieron hace algunos años.

Hacia mediados del siglo XVIII, se inicia la construcción de la Capilla de la Señora del Carmen en el antiguo barrio de Tlazintla. En 1972, Patricio Joseph Tovar, mestizo, vecino de la población adquiere la licencia eclesiástica para su construcción y compra a las herederas del Sr. Francisco de Robles, el solar por la cantidad de veinte pesos e inicia la edificación de la Capilla que se concluye el 8 de Diciembre de 1772. Es una joya arquitectónica por el labrado de la cantera rosa de su fachada, los retablos de madera tallados y labrados, así como sus cuadros a l óleo sobre la tela. Su pequeño atrio, contenía anteriormente un bosquecillo, ciprés que le daba una bella apariencia,, enmarcando los árboles con la fachada del templo, ofreciendo un hermoso contraste el verde de las plantas, con el rosa de la cantera, desgraciadamente estos árboles fueron destrozados en años recientes.

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