SUCESOS HISTÓRICOS MÁS IMPORTANTES

Se ha señalado al inicio de esta monografía que la historia es el cimiento del presente y del futuro, de ahí la importancia de este capítulo que nos explica y nos da a conocer el Omitlán de ayer. Existe aún desconcierto entre los historiadores acerca de la fecha en que fue fundado el pueblo de Omitlán: así el señor Odon V. Ángeles Gutiérrez en su monografía afirma: "Se desconoce la fecha de su fundación, pero se presta a creer que su origen es prehispánico dada la gran cantidad de puntas de flecha de obsidiana, así como hachas de guerra que fácilmente se encuentran en los alrededores de esta población". Por otro lado en el libro denominado los municipios de hidalgo, se señala: "Este poblado fue fundado en 1760 y se recibió la categoría municipal el 2 de Diciembre de 1862; se le agregó el nombre de Juárez en honor del benemérito de las Américas. La gran obra histórica llama el Catálogo de Construcciones Religiosas del Estado Hidalgo, patrocinada su edición con la S.H.  y C.P., es de obligada consulta en esta clase investigaciones, sobre todo que al abordar la historia del municipio de Omitlán, da a conocer una curiosa descripción hecha por el señor Pedro Rivera, comerciante Omitlence, propietario de la tienda llamada "La Ciudad de México", en la cual se expendían toda clase de mercancías, abarrotes, vinos y productos diversos, lo mismo el finísimo azafrán español y el buen cogñac francés, hasta herraduras y clavos de herrar, así como el mexicano chocolate y el chicle "en piedra", dicha negociación a la que acudía a surtirse numerosa clientela de toda la región y de otros municipios estuvo ubicada en la casa hoy propiedad del señor Pedro Rivera Castillo, ubicada en la avenida Juárez de la cabecera municipal; con la gran relevancia de los datos que se contienen en la obra mencionada, me permito hacer la siguiente trascripción literal: "después de la toma de México los españoles van a probar los inmediatos realis o minerales del Monte y del Chico, al SE. y E, respectivamente y como Omitlán quedase en medio del camino factible de las haciendas de beneficio, prosperó, relatando a este aspecto el señor Domínguez y Yañez que:".. y en el paso se edificó el primer departamento de fundición de plata que fue bautizada con el nombre de hacienda de Salazar, quizá por el de su propietario, estando sujeta a esta zona a la provincia de Omitlán".

"El municipio y, consecuentemente la cabecera de Omitlán fueron erigidos como tales el 2 de Diciembre de 1862 por decreto del C. Manuel F. Soto, gobernador y comandante del 2o. Distrito del estado de México, hoy estado de Hidalgo a la formación del cual y con igual categoría pasó a depender del Distrito de Atotonilco el Grande, hasta que implantada la Constitución de 1917, que abolió la antigua división política para no dejar sino los municipios adquirió su independencia".

"Hallase situada la población en una hermosa cañada que circundan las montañas del Real del Monte, Cerro Gordo, Cerro del Gallo y Peña del Zúmbate, a la que según ya dijimos débese la interpretación de "dos muelas", puesa elevación, a cierta distancia, semeja dos muelas de algún celoso".

"Corresponde el principio de la evangelización de los frailes agustinos, los que fundan "la Cofradía de la Virgen" y construyen pequeña capilla pero pronto son reemplazados por el clero secular, y así se dice:"... la primer capilla, edificada a mediados del siglo XVI ya figuraban para 1729 en una lista de los curatos servidores por clérigos...".

"El siguiente dato con que se cuenta es la relación proporcionada por el señor don Pedro Rivera, anciano de 80 años, originario de la población, quien mediante sus recuerdos y algunas notas de sus antepasados, nos dice si no a la letra, sí en síntesis:"La compañía Minera del Real del Monte y Pachuca llegó a este lugar el año de 1824, y encontrando indicios de yacimientos de metal en una inminencia llamada en un principio  "Cerro de la Virgen" y ahora "Ciénaga Grande", que estaba cubierta de bosques y era propiedad de "Cofradía de la Virgen de Loreto", radica en dicho pueblo, propuso que a cambio de esa pertenencia construiría un templo o daría la suma de $60,000.00 en efectivo. Se optó por esto último, no sin fijarse que esta cantidad se invertiría en la construcción de un templo, y así fue como en 1840 se inicio la fábrica del que debería haber llevado la advocación de "San Marcos".

"Malos administraciones, derroches y malos manejos hicieron que de esa suma solamente se empleasen para el objeto señalado únicamente a "20,000.00 con los que apenas se hizo la cimentación y parte de los muros que fueron interrumpidos a una altura de dos a tres metros. Se improvisaron igualmente algunos locales en los que se celebraba el culto, pero más tarde todo se abandono y así permaneció hasta el año de 1912, y cuya fecha, siendo presidente municipal el señor don Ramón Estrafur y por orden del mismo, se procedió a su demolición para que ese material fuese aprovechado, como lo fue, en la construcción de diques longitudinales, que en fracciones se conservan, a fin de proteger a la población del río Amajac. A cambio de estas obras de efectuó la Compañía de Cubitos, ésta recibía la concepción de "dos pulgadas de agua". "El terreno que ocupó este inmueble es lo que en la actualidad ocupa el Jardín Juárez, que está limitado; por el norte, por la Plaza Principal; por el sur, por las calles de Aquiles Serdán , por el oriente, por calle sin nombre y por el poniente, por la carretera en proyecto Pachuca-Huejutla".

"Poco tiempo después de suspendidos los trabajos del templo de San Marcos y viendo el padre Madrid que no podíase terminar la construcción debido a las fuertes erogaciones que exigía la magnitud de la obra emprendida excitó a los fieles para que contribuyesen con lo que estuviera a su alcance: dinero, materiales o trabajo y así edificar otro de menores dimensiones, o sea de costo más reducido".

"Tuvo éxito en su empresa, y así fue como en 1858 terminóse la nave del templo o parroquia de La Asunción y una de las torres con que debía estar dotada, condición con la que aún permanece. Las campanas se habían fundido con anterioridad y a esas se agregaron las destinadas al templo de San Marcos y otras muy antiguas que pertenecieron a la Cofradía de la Virgen de Loreto". Hasta aquí el señor Rivera.

"En la actualidad y constituyendo el campanario, existen siete campanas que ostentan las siguientes inscripciones:

  1. El señor Peñafiel, año de 1761

  2. Santa Bárbara, 1769.

  3. ...1823...

  4. Ntra. Señora de Loreto...1828.

  5. María Guadalupe por los operarios de Sánchez y Velasco. Omitlán 4 sobre. 1854. (Es la campana mayor).

  6. Ntra. Señora del Refugio. Los operarios Sánchez y Velasco. Omitlán, 3 de octubre de 1854.

  7. ...De noviembre de 1854. San Marcos. Por operarios de Sánchez y Velasco.

"La iglesia fue erigida en parroquia hasta 1862 fecha en la que se subordinó a la vicaría foránea del Mineral del Monte y por consecuencia al Obispado de Tulancingo".

En el año de 1848 el brillante historiador mecicano riunado de Veracruz Ing. Manuel Rivera Cambas, autor de la obra histórica México Pintoresco, Artístico y Monumental, hace una descripción sumamente interesante del pueblo de Omitlán cuando realizó una visita al mismo, pero la belleza de su lenguaje y total amenidad, se transcribe textualmente, ya que en ella se encuentra gran parte de la historia de este girón de tierra hidalguense: "El camino entre Real del Monte y Omitlán es muy ameno y pintoresco. Descendiendo entre las minas de San Cayetano y Dolores, dirección al norte, se recorre la parte inferior de la cañada, se deja a la izquierda el agrupado caserío y a la derecha las vertientes del Cerro-Alto, el Judío y Peña del Águila y van quedando escalonadas las chozas, unas con floridas jardines y otras con sementeras de maíz y de cebada. El camino, lleno de inflexiones, va siempre estrecho entre declives de la serranía: a cada paso varían las decoraciones de aquella perspectiva; ya en la mina de Acosta, cuya máquina extrae corrientes de agua al acompasado golpe de los émbolos; ya un reducido valle al pie del cual se percibe una cascada; a veces se presentan enormes peñascos que amenazan desprenderse al menor impulso; se pasa la Hacienda de Guerrero, empleada en beneficiar metales y la frondosa cañadas de la Virgen con sus bosques de pinos, a cuyo pie corren las aguas con rapidez; el acueducto de la hacienda del Aviadero con sus pesadas ruedas que giran lenta y acompasadamente; se deja a un lado la hacienda de Sánchez y se entra al pueblo de Omitlán".

"Entre los muchos sitios bellos y magníficos que tiene la República, pocos presentan rica y variada escena que los alrededores del Real del Monte y Omitlán, a más de nueve mil pies de elevación sobre el nivel del mar, dilatados bosques de pinos y encinos se extienden sobre las enormes montañas, hay profundas barrancas cubiertas con arbustos, matorrales abundantes plantas diversas, dominando el paisaje alguna altura aislada o enormes mesas de pórfido, que toman frecuentemente formas fantásticas y la imaginación representa como gigantes que vigilan aquellas selvas".

"La municipalidad está al norte del Real del Monte la riegan el río de este nombre y los varios afluentes que nacen en las alturas cercanas, hace treinta y cuatro años que Omitlán comenzó a figurar, precisamente cuando por la abundancia de metales de las minas de Pachuca, fue preciso ensanchar las haciendas de beneficio. Es Omitlán población nuevamente reedificada con regularidad y muy pintoresca, colocada en un pequeño plantío y cercada de grandes montañas, sobresaliendo a distancia de dos mil doscientos metros El Zumate, que se eleva verticalmente sobre la población; esa altura se presenta a manera de dos peñas, una junto o otra con una maceta en la parte superior y por su configuración  parecen dos muelas gigantescas, levántese al oriente en el cerro del Guajolote que forma parte de la extensa cordillera y al sur limita el espacio la cañada del Real del Monte, quedando solamente al norte la llanura del Grande".

"Sobresalen entre las alturas, la llamada "Peñas Cargadas", cerca del rancho del Guajolote, compuesta de rocas vistosas, en forma de columnas de pórfido que descuellan sobre el bosque en aquella altura, vega la vista sobre las llanuras espaciosas interrumpidas a trechos por montuosas barrancas o limitadas por sombríos peñascos de azuladas montañas".

"El río de Omitlán, bastante encajonado desde su nacimiento forma una obra conocida con el nombre de la cañada del Real , y de en medio de ella desciende con rapidez hasta la llanura del Grande; ese río ostenta en todo su curso hermosos saltos de agua; el camino hasta las haciendas de Velasco y Regla, sigue el curso de la corriente, atravesándolo a veces por medio de puente aumenta el río su caudal con varios afluentes que nacen en los deciveles del abra y en dos barrancas que conducen agua todo el año, brotando en su origen de la alta peña del Zumate; recibe también el agua del socavón de Morán".

"Omitlán tiene agradable aspecto, algunas de sus fincas son buenas, todas sus casas son entresoladas y cada día aparecen nuevas construcciones. No tiene ese pueblo ese pueblo más que capilla y algunas paredes que debían servir para la gran parroquia que se ha proyectado y quedo la obra sin concluir, por la calle principal pasa el camino que va del Real a Regla circunstancia que le da animación y aumenta el movimiento mercantil, debiendo esta prosperidad rápida, a las haciendas de beneficio nombradas el Aviadero, Sánchez, Velasco, Peñafiel, San Cayetano, El Carmen y Guerrero. No siendo bastante el agua del río de Omitlán, para mover las ruedas hidráulicas de cada hacienda, se ha montado máquinas de vapor, auxiliares, en Sánchez y Velasco. La hacienda de Guerrero está dedicada exclusivamente a la molienda de mierales y las lamas  que son conducidas a la Velasco para beneficiarlas; esa finca de Guerrero es una de las más sólidas y pintorescas que posee la compañía y las aguas que le dan movimiento son las que conduce el socavón de Moran, aumentadas con las de algunos arroyos que nacen de ambos lados de la cañada. La hacienda del Aviadero también está destinada a la molienda, con 2 ruedas hidráulicas que mueven cada uno un mortero de concentración. El beneficio de estas lamas de hace en la hacienda de Sánchez, que es vasta y con buenas habitaciones ocupadas por los empleados de la compañía, ahí se ha establecido el sistema de toneles movidos con dos ruedas hidráulicas y la máquina de vapor auxiliar. En esta hacienda se han beneficiado 10,300 cargas por trimestre, siendo  de $31 el costo por montón de 30 quintales. Es considerable el consumo de leña empleada en la calcinación de las máquinas de vapor. La hacienda de Velasco es tal vez la más importante: los minerales son tratados por el mismo método de toneles, movidos por agua y vapor".

"La hacienda de Peñafiel así como todas las obras situadas en el río del Carmen y que a la compañía pertenecen, están destinadas a la molienda, como ruedas hidráulicas que mueven los morteros".

"Desde Omitlán se puede hacer en poco tiempo un paseo a la cima del Zumate; se dejan a un lado las rocas acantiladas, se trepa por peñascos, por espesos matorrales y al fin se llega a la cima de la roca monolítica, ascendiendo por una grieta enorme que la divide, desde cuyo  punto superior parece como que se va a rodar el abismo. Desde arriba se perciben grandiosos panoramas; las campiñas de Atotonilco el Grande, limitadas a lo lejos por la barranca grande; las columnas basálticas de la sierra del río del Carmen y la dilatada serranía de Zacualtipán, limitando el horizonte; el cerro del Gallo de forma cónica, siempre cubierto de vegetación; la barranca de Regla donde el agua se precipita entre los basaltos; las chozas de los campanarios y las haciendas de beneficio; las eminencias volcánicas de las Navajas, el Jacal, la Peña del Águila y otros muchos cerros que a lo lejos quedan velados con la bruma y que enlazan la interminable sucesión de alturas, forman paisajes magníficos, sorprendentes, de un carácter especial que le dan las rocas caprichosas, entre las que se distinguen los Jaspes, Las Ventanas y las Monjas en los bosques de Atotonilco el Chico, o los peñascos porfídicos que sobresalen, conocidos con los nombres de los órganos de Actopan o los Frailes, aquellos semejando soberbios edificios alzados en la región de las nubes y estas estatuas colosales construidas por gigantes".

Como se desprende de las anteriores narraciones fueron las haciendas de beneficio de Guerrero, Aviadero, Salazar, Velasco y Peñafiel las que propiciaron la actividad económica de Omitlán, y consecuentemente se incrementó su número de población por la cantidad de trabajadores que ocupaban estos laboratorios, situación determinante para que los propios habitantes solicitaran a las autoridadades competentes del segundo Distrito Militar del estado de México, se le otorgara la calidad de municipio, lográndose esto el 2 de diciembre de 1862, gracias al apoyo que brindó a los omitences don Manuel Fernando Soto, comandante del 2° distrito militar, es decir Omitlán surge su vida municipal independiente 7 años  antes que  se creara nuestra entidad federativa debido a ello el ayuntamiento  de Omitlán participó actualmente en las gestiones para crear un nuevo estado con el nombre de Hidalgo, lo que se logro el 16 de Enero de 1869, lo anterior se confirma con la siguiente ficha bibliográfica: "La necesidad de crear nuevos estados se fue haciendo cada vez más urgente, y ya  en 1856 el mismo liberal hidalguense Fernando Soto defendió el proyecto para formar el estado de Iturbide que debería de formarse con los distritos de Tuxpan, Tampico, Tecanhuitz, Huejutla y el sur de Tamaulipas. Al terminar la guerra de reforma los diputados Alejandro Garrido, Justino Fernández y José María Revilla encabezaron un proyecto para establecer un nuevo estado que llevaría el nombre de Hidalgo, para lo cual invitaron a los habitantes de Tula, Tulancingo, Teotihuacán, Huejutla y Texcoco para que opinaran al respecto. Los trámites de este proyecto se interrumpieron durante la guerra de intervención francesa, sin embargo en 1862 se recibieron en el Congreso de la Unión  que aprobaba el citado proyecto y pedían pertenecer al nuevo estado; estas peticiones estaban suscritas por los ayuntamientos de Zimapán, Tecozautla, Mineral del Chico, Tecamac, Huichapan, Tulancingo, Mineral del Monte, Izcuincuitlapilco, Tepetitlán, El Arenal, Omitlán, Huascazaloya, Otumba y Teotihuacan, además de otros".

En la historia de Omitlán cabe destacar como dato importante a la visita que realizó el emperador Maximiliano a Omitlán y sobre todo las haciendas de Aviadero, Sánchez y Velasco, el día 28 de agosto de 1865, donde el director de la compañía inglesa Real del Monte le hizo una detallada explicación al archiduque del funcionamiento de las haciendas, y así en los anales del estado de Hidalgo el profesor Teodomiro Manzano aparece la siguiente nota: "Agosto 28 de 1865.- Lunes . Hoy sale el archiduque Maximiliano de Pachuca para el Real del Monte acompañado del director de la compañía inglesa quién le enseño las máquinas en movimiento. Después se dirigió a la hacienda de San Miguel pasando por Omitlán, Velasco y por el bosque de San Miguel Regla, en el Real del Monte, a causa de la densa niebla que reina ahí, le dijo al director ingles: "Los británicos son de tal manera pegados a su país que a donde quiera que van se llevan hasta las brumas de Inglaterra". No obstante que el personaje que visitó nuestro pueblo es de triste memoria para todos los mexicanos que somos amantes del liberalismo. La consignamos aquí como un mero dato histórico.

Al leer esa importante obra, base de la historia hidalguense, denominada Anales del Estado de Hidalgo, escrita por el Prolijo historiador realmontence  profesor Teodomiro Manzano, nos encontramos datos relativos a Omitlán. Como el siguiente: "Abril 20 de 1863 Lunes. Los vecinos de Omitlán remiten la cantidad de cincuenta y cinco pasos para contribuir a los gastos de la guerra. La prensa de aquellos días encomia la actitud de los omitecos, que no obstante ser un pueblo tan pequeño y de tan escasos recurso, hayan remitido dicha cantidad." Lo anterior demuestra el civismo el civismo y patriotismo de los omitences y que para el año de 1863 la cantidad e cincuenta y cincuenta pesos, era   inmensa, pero los recursos económicos de los originarios de aquí llegaron para contribuir a la gente a la guerra de reforma. En esta época es cuando el presidente Juárez envía doce rifles calibre 50 para la defensa del pueblo, rifles que aún son conservados algunos de ellos en algunas casas de la cabecera municipal, esto según comunicación verbal que nos hizo el señor Jorge Manning Rivera. También encontramos en dicha obra algunos pasajes no muy positivos como el que sucedió el día jueves 4 de junio de 1868,: "Es raptada en Omitlán una hermosa muchacha por un oficial de Antonio Noriega. El hecho en sí reprobado llamó la atención por circunstancias. Después del atentado andaba el ofical por camino de aquel mismo rumbo y encontró al padre de la joven y le tiro aquel un balazo herró, el padre ofendido tomó una piedra que arrojó en la frente de raptor, con tan buena puntería que lo derribó del caballo y murió. El padre cogió el cadáver y en el mismo caballo lo indujo al pueblo de Omitlán y lo presento al Juez. Este enseguida mando decir a Noriega que tenía preso a un oficial suyo y que viniera a sacarlo. Así lo hizo Noriega. Se llevo al oficial muerto y enseguida desapareció el juez de aquella población". En el devenir histórico de nuestro pueblo destaca no sol a nivel regional sino nacional la batalla de Casas Quemadas, donde los principales protagonistas fueron los omitences Coronel José María Pérez, su hermano Jesús Pérez y un gran número de omitences anónimos que ofrecieron sus vidas en ese gran hecho de armas, por lo que en capítulo especial se describe con mayor amplitud.

 hidalguia@hotmail.com 

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