PERSONAJES ILUSTRES DEL MUNICIPIO

Vicente Villagrán Gutiérrez. Fue uno de esos hombres dignos del homenaje de sus conciudadanos, este héroe Nopalteco, nació el 24 de agosto  de 1819 en una ranchería que dista de Nopala a unos tres kilómetros llamada "El Pedregoso", fue hijo de Don Vicente Villagrán y doña Ignacia Gutiérrez, y es precisamente en homenaje a este héroe que su patria chica se llama Nopala de Villagrán. Concurrió a la escuela de Nopala, posteriormente se dedicó a los trabajos del campo combinada con alguna otra ocupación, a los trabajos del campo que combinaba con alguna otra ocupación, como por ejemplo, fue nombrado socio de la organización, denominada Instancia Pública, después por sus meritos fue nombrado Tesorero par los fondos municipales, esto fue en el año de 1845, que en aquélla época se conocía con el nombre de "Presupuesto y Arbitrios". En el mes de Septiembre de 1846 se promulgó en la Cuidad de México "La Ley de la Guardia Nacional", de acuerdo con esa ley, nuestro biografiado fue nombrado segundo Alférez de la Segunda Compañía tomando en cuenta su alto patriotismo. Se destaco por su participación en la intervención Francesa y Norteamericana. Muere un 2 de agosto de 1867 en la ciudad de Huichapan, Hgo.

Nicolás Romero, "El león de las montañas". Nació el 6 de diciembre de 1827, sus padres eran muy pobres y quizá por eso no se preocupaban de darle una mediana educación, durante su niñez su trabajo era ayudarle a su padre en las faenas del campo, años después aprendió el oficio de tejedor más o menos cuando tenía 10 o 12 años algunos más tarde ya se encontraban trabajando como uno de los mejores operarios de la Fabrica de mantas. "El Molino Blanco" en México, después en una fábrica que se encontraba en el Río Hondo, por Naucalpan: y por último en la fabrica la Colmena, esta fábrica está en el poblado que antes era San Pedro Azcapotzaltongo, que en la actualidad se llama "Villa Nicolás Romero" este nombre se lo pusieron precisamente como un homenaje a su memoria, en dicha fábrica trabajo hasta la edad 30 años, acostumbraba a vestirse siempre de negro, el pelo cortado a rape, y era muy servicial, usaba sombrero de ala ancha mismo que siempre llevaba sobre las cejas. Su vida era muy pacífica hasta este acontecimiento repentino, vino a decidir quizá su destino, este acontecimiento fue el que cambió por completo la vida de Nicolás Romero, esto sucedió en el año de 1858, cuando se encontraba en una fiesta por el rumbo de Tlalnepantla, era una de esas fiestas en donde algunas veces no se puede evitar una pequeña riña, en la que Nicolás Romero tomó parte como el primer protagonista en donde su contrario era un panadero el cual salió herido y como el fue el autor principal también fue el primero en abandonar el lugar y duro algún, tiempo escondido en los montes cercanos, uno de esos días regreso y como era lógico se enteró que no estaba acusado de haber herido al panadero, sino también por asalto y robo y optó nuevamente Por regresar a las montañas. Mientras tanto en nuestro país sé acrecentaba rumor de la Guerra de Reforma y así fue como Nicolás Romero entró a la fuerza liberal, días después se encontraba en filas del jefe de guerrilla don Aureliano Rivera, ya con el grado de Alférez, en esta forma principio su carrera militar. Participó en la guerra de tres años de 1857 a 1860 siempre sostuvo los principios liberales. La vida de nuestro personaje en sus servicios de favor de la causa republicana, transcurrió entre montes y montañas; por ello su sereno arrojo lo llamaron "El león de las Montañas". En donde siempre resultaba realmente invencible. Fueron varias las hazañas del "León de las Montañas", sin embargo en donde más lució fue en Trojes y Tulillo, en esta batalla tomaron a más de quinientos hombres prisioneros, también participó en las batallas de Tacámbaro, Toluca, México y sus alrededores, en haciendas y ranchos cercanos. Sin embargo un día en la cañada de Apatzingán, las fuerzas de Romero fueron sorprendidas y el guerrillero quedó prisionero. Al ser perfectamente identificado con muchas precauciones fue trasladado a México, donde una corte comercial, de las fuerzas intervensionistas lo condenó a muerte. Esto ocurrió el 11 de marzo de 1865. El único guerrillero que presencio su muerte, fue su noble y valiente compañero don Silviano Gómez, de Huichapan, Hgo.

Don José Maria Correa "Cura de Nopala". Este sacerdote fue  uno de los insurgentes que habiéndose declarado por la Independencia desde el principio de ella, consiguió verla realizada, a pesar de las muchas vicisitudes que sufrió. Se desconoce la fecha y lugar de nacimiento, y únicamente se sabe que era originario del Arzobispado de México y que obtuvo el curato de Nopala por oposición, por lo que lo tenía en propiedad. Estaba sirviéndolo cuando estalló la Revolución, y aunque simpatizó con el movimiento, no hizo nada que denunciase sus simpatías, pero no era fácil que las tuviese muy ocultas supuesto que cuando paso por ahí el general José de la Cruz un 20 de noviembre de 1810, donde se le recibió con muestra de alegría, pero el jefe Realista, decidió desplegar extremado rigor, que también cuadraba con su ingénita crueldad, despreció esas manifestaciones y ordenó desde luego al cura Don José María Correa que se presentara en México al virrey, quienes a su vez lo remitió al Arzobispo Lizama que lo despojo de su curato. Correa no tardo en aparecer al frente de una guerrilla apoyando la Independencia. Se unió a Pino Arriaga y chito Villagrán y empezó sus correrías derrotando el 11 de septiembre de 1811 en Venta Hermosa a Andrade, recorriendo la comarca hasta Villa del Carbón. La Junta de Zitácuaro le dio el nombramiento de Brigadier y el mando superior de esos rumbos, consiguió batir él, en Villa del Carbón al Capitán Columna, y pocos días después el 22 de noviembre, atacó con dos mil hombres el convoy que conducían Castro, Michelena y el mismo Andrade, quitándoles bastantes cargas; al regreso de ese convoy estuvo a punto de apoderarse de la persona del obispo Cabañas, de Guadalajara, lo que, según dice Correa, no se verificó por que él se negó a mandar perseguir al prelado. A consecuencia de esta acción fue excomulgado el cura de Nopala y fijado su nombre en tablillas en las puertas de la iglesia de México. Llamado por la Junta de Zitácuaro, que esperaba ser atacada por Calleja se puso en camino y en éste encontró al Dr. Cos, que ni él mismo sabía si era insurgente o realista y lo llevó a aquélla  población, donde al fin se declaró por la causa de la independencia. Fue allí derrotando con todo el Ejército insurgente, sin embargo, con su fuerza escoltó a la junta hasta Tlalchapa, y habiéndosele casi acabado su tropa, con sólo dieciséis hombres de regresaron a Nopala, donde se ocupó en reunir gente, armada y fundir cañones. Cuando más entretenido estaba en estas ocupaciones, fue sorprendido por las fuerzas del comandante Ondarso en la madrugada de 5 de marzo de 1812, pero pudo huir.

La decadencia que estaba la revolución los trabajos en que Correa había sufrido y la grave enfermedad que le aquejo, lo indujeron fácilmente a acogerse al indulto, hecho prisionero por una partida realista que mando a las ordenes de Revilla, el corregidor de Toluca, don Nicolás Gutiérrez fue traído a México y consignado a al arzobispo Señor Bergosa, que lo mandó a tomar ejercicios a la casa Profesa. El indultado se sometió a cuantas condiciones se le impusieron por su prelado pero nada de ello fue obstáculo para que el 6 de octubre se evadiera de la profesa, dejando cartas para todos ellos y se dirigió al sur para uniste con Morelos que en aquel entonces se encontraba en Chilpancingo. Desde entonces siguió la suerte de aquel caudillo con el grado de mariscal de campo y estuvo en el desgraciado campo de Valladolid, Puruáran, Chichihualco y Tlacotepec en toda esa última desgracia de la campaña del héroe del sur.

Realizada la independencia se presento a la junta calificadora de méritos, ante la que hizo su panegilco, por el estilo de los que hicieron el padre Parra  y Fray Gregorio  de la Concepción, cuando también reclamaban premios, El sacerdote insurgente pretendía que se lo devolviese su curato en Nopala lo que no consiguió, al menos hasta 1824. Se ignora el resto de su vida y la facha de su muerte.

Se hace mención de algunos personajes ilustres de Nopala, que desafortunadamente no se cuenta con ningún dato de ellos.

Ignacio Casimiro-Insurgente

Martín José Antonio-Insurgente

Modesto García-republicano

Luis Robledo-Republicano (1829-1860) pocos datos se tienen de este valiente y patriota Nopalteco, sin embargo se sabe que nació en Nopala en el año de 1829. Fueron sus padres Quirino Robledo y una señora de apellido Leal. Robledo, era un oficial moderno, grueso y de abultados labios, vestido de lienzo y sin más almas que un revolver en la cintura; esta es la descripción que dio el General Riva Palacio cuando lo conoció por haber militado bajó sus órdenes. Era todo un buen patriota, valiente fiel, constante y lleno de inteligencia, de honradez y abnegación era uno de los jefes más querido en el centro. Transcribimos ahora una anécdota en uno de los tantos combates en que participo el coronel Robledo "Un jefe venia en la cabeza con un revolver en la mano adentro, adentro muchachos... ¡viva el Coronel Robledo! Grito a la tropa y se lanzaron los soldados furiosos contra el enemigo una descarga contesta a sus gritos, y Robledo calló  atravesado por dos balas quince minutos después. Esto aconteció en Tacábaro y su cuerpo fue rescatado por el valiente Huichapense Pascual Rubio en medio de una lluvia de balas.

Coronel Félix Olvera.- Nació en la comunidad de Jagüey, fue otro patriota que prestó sus servicios a la causa liberar al lado de los coroneles Vicente Villagrán, Luis Robledo y otros. En los últimos años un grupo de Jagueyenses un formado un pueblo a quien con todo acierto le ha puesto su nombre "Coronel Félix Olvera".

Ko-ni Conin palabra otomí que significa ruido.- Nació en el municipio de Nopala en el último tercio del siglo XV. Desde antes de la caída de la gran Tenochtitlan comerciaba y traficaba chichimecas en la cañada en Querétaro. Esto sucedió cuando al extenderse la conquista hacia las tierras de Jilotepec, sitio que habitaba Konin con sus pobladores. A este sitio llegó un grupo de misioneros quienes tuvieron a su cargo la conquista espiritual de esta manera Konin al igual que muchos naturales fueron bautizados, recibiendo el nombre de Fernando Tapia, mismo que fundó la ciudad de Querétaro.

 hidalguia@hotmail.com 

"Regresar a Bienvenida"